A pesar de que son muchas las personas que creen que la firma brasileña Petrobras no tiene activos en Argentina, en realidad sí tiene un área hidrocarburífera en Neuquén en donde se encara Vaca Muerta y desde la cual la compañía exportará gas natural hacia su país de origen.
La información a la que accedió EnergíaOn en exclusiva, da cuenta de que Petrobras Argentina recibió a fines del mes pasado la autorización de la Secretaría de Energía de la Nación que conduce María Tettamanti para iniciar las exportaciones con destino a su sede central: Petróleo Brasileiro SA, más conocida como Petrobras.
Los despachos partirán desde la única área que la operadora nunca vendió de la carpeta que supo tener en Argentina, el bloque Río Neuquén. En esta área, la firma brasileña tiene una participación del 30%, siendo su socia y operadora YPF, con el 70% restante.
El bloque se ubica muy cerca de la ciudad de Neuquén, rozando con el límite con Río Negro, y desde hace poco más de un año YPF comenzó allí a desarrollar la ventana del gas de Vaca Muerta.
La exportación autorizada por el gobierno de Javier Milei se encuadra bajo la modalidad interrumpible, que implica que los despachos podrán realizarse siempre y cuando no haya una demanda adicional de gas dentro de Argentina.
En detalle, el acuerdo de partes marca que Petrobras Argentina podrá exportar a su casa central hasta 1 millón de metros cúbicos por día desde este mes y hasta fines de febrero de 2027.
Según la autorización dada por Nación, el precio pautado para estas exportaciones es de 7,82 dólares por millón de BTU en la frontera argentina. Con lo cual se espera que llegue a Brasil a unos 9,32 dólares el MBTU.
El recorrido que hará este gas atravesará toda la Argentina a través del Gasoducto Norte, para llegar a la frontera con Bolivia. Allí se propuso que el gas ingrese al sistema boliviano por el Gasoducto Juana Azurduy (GIJA) o bien por el gasoducto Madrejones que comunica Tarija, en Bolivia, con Campo Durán, en Salta.
Se trata de una triangulación, pues ya en Bolivia el gas recorrerá el Gasoducto Bolivia-Brasil, para llegar finalmente a Brasil, en donde se detalló que será destinado al consumo de usuarios industriales y de generación térmica.
El interés de Brasil en el gas de Vaca Muerta
Desde Petrobras y el gobierno de Brasil se manifestó en varias oportunidades el interés de poder contar, por medio de la petrolera de bandera de ese país, con una parte de la producción de gas de Vaca Muerta, para alimentar sus industrias.
Es que si bien el vecino país tiene su matriz energética fuertemente centrada en la generación hidráulica que dan las enormes represas del sur, los cambios en las condiciones climáticas alteran sus entregas y es en esas bajas que se apunta a contar con gas natural como fuente energética.
La directora de Exploración y Producción de Petrobras, Sylvia Anjos detalló en diálogo con EnergíaOn a principios de año que la firma busca incluso expandir su presencia en Vaca Muerta, en una selección que marcó que se centrará en «lo más conveniente y lo más económico para nuestro portafolios». Un punto sobre el que Anjos puso de manifiesto la ventaja que tiene Vaca Muerta en esta competencia de proyecciones globales.
«Amamos el petróleo, pero el gas es más interesante porque ya hay gasoductos existentes entre Bolivia y Brasil que podemos utilizar y estamos haciendo algunas negociaciones con Argentina para que nos llegue hasta Brasil gas desde Argentina por las redes de Bolivia», precisó la directora de Exploración y Producción de Petrobras.
La clave: la reversión del Gasoducto Norte
Las exportaciones de gas natural de Vaca Muerta a Brasil, utilizando como vía los gasoductos de Bolivia, comenzaron a darse en marzo de este año a raíz de dos claves.
Por un lado, el declino de la producción de gas natural de Bolivia hizo que en la línea que va a Brasil haya una amplia capacidad ociosa. Según estimaciones internacionales, el ducto tiene casi dos tercios de espacio disponible, pues sobre una capacidad nominal de 30 millones de metros cúbicos diarios, hoy está transportando solo unos 12, pues la totalidad de la producción de Bolivia ronda los 24 millones de metros cúbicos diarios.
Pero sin lugar a dudas, el gran habilitador de este cambio que potencia la integración energética regional, fue la reversión del Gasoducto Norte, que tradicionalmente trajo gas desde Bolivia hasta Córdoba y que con la reversión que inició a fines del gobierno de Alberto Fernández, permite ahora que el gas viaje de sur a norte, llevando la producción de Vaca Muerta no solo a la exportación, sino también a las provincias del Noroeste Argentino.
Precisamente, este doble uso hace que las exportaciones sólo puedan darse en meses templados, en donde la demanda de gas de Argentina es baja y queda capacidad libre para la exportación, ya que el límite -más allá de que aún no se terminó una estación de bombeo- está en el ingreso del gas desde Vaca Muerta al gasoducto troncal argentino.
Fuente: RN.
Leer más noticias de Energía.